Aviones de combate de China sobrevuelan cerca de Taiwán en primer desafío a Biden
(CNN) — China envió dos grandes formaciones de aviones de combate cerca de la isla autónoma de Taiwán el fin de semana, presentando un importante desafío de política exterior para el nuevo presidente de Estados Unidos, Joe Biden, apenas unos días después del inicio de su administración.
El Ministerio de Defensa de Taiwán dijo que 13 aviones chinos ingresaron a la parte suroeste de la zona de identificación de defensa aérea de la isla (ADIZ) el sábado, seguidos de 15 el domingo, lo que llevó a Taipei a tomar medidas defensivas, incluyendo el despliegue de aviones de combate para monitorear los vuelos chinos.
Según el Ministerio de Defensa de Taiwán, los aviones militares chinos realizaron más de 380 vuelos a la zona de identificación de defensa aérea de la isla el año pasado. La Administración Federal de Aviación de EE. UU. define una ADIZ como «un área designada de espacio aéreo sobre tierra o agua dentro de la cual un país requiere la identificación, ubicación y control de tráfico aéreo inmediatos y positivos de aeronaves en interés de la seguridad nacional del país».
Crece la tensión entre EE.UU. y China en el Mar de China Meridional
Si bien la frecuencia de tales simulacros ha aumentado en los últimos años, el momento y la composición de las últimas formaciones, en su mayoría aviones de combate y bombarderos, parecían dirigidos a enviar un mensaje a la nueva administración en Washington.
Beijing reclama la soberanía total sobre Taiwán, una democracia de casi 24 millones de personas ubicada frente a la costa sureste de China continental, a pesar de que los dos han sido gobernados por separado durante más de siete décadas.
China envía aviones de guerra cerca de Taiwán 0:43
El presidente de China, Xi Jinping, ha prometido que Beijing nunca permitirá que la isla se independice y se ha negado a descartar el uso de la fuerza si es necesario.
En un comunicado el sábado, el gobierno de Biden instó a Beijing a dejar de intentar intimidar a Taiwán y prometió apoyo al gobierno democrático de Taipei.
«Instamos a Beijing a que cese su presión militar, diplomática y económica contra Taiwán y, en cambio, entable un diálogo significativo con los representantes elegidos democráticamente de Taiwán», dijo el portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Ned Price, y agregó que los lazos entre Estados Unidos y Taiwán se están profundizando y Washington mantiene su compromiso con el autogobierno de la isla.
Estados Unidos mostró un fuerte compromiso con la defensa de Taiwán durante la administración de Trump, al aprobar la venta de hardware militar avanzado a Taipei, incluidos aviones de combate F-16, mientras mandaba enviados de alto nivel a la isla, dos medidas que enfurecieron a Beijing.
En una muestra inicial de apoyo de la administración de Biden hacia la isla, el embajador de facto de Taiwán en EE.UU., Hsiao Bi-khim, asistió a la toma de posesión de Biden la semana pasada. Fue la primera invitación oficial de este tipo a un representante del gobierno de Taipei desde 1979, cuando Washington estableció lazos diplomáticos formales con Beijing. El mismo día, Beijing anunció sanciones contra el secretario de Estado estadounidense saliente, Mike Pompeo, y otros 27 funcionarios de alto rango bajo Trump, acusándolos de «prejuicio y odio contra China».
Un portaaviones estadounidense en el Mar de China Meridional
Además de respaldar a Taiwán, Price, el portavoz del Departamento de Estado dijo el sábado que Washington también apoyará a otros amigos y aliados del Indo-Pacífico, mientras China intensifica sus actividades militares en la región.
¿Por qué hay tensiones en el mar de China Meridional?
En una muestra de esa solidaridad, un grupo de ataque de portaaviones de la Armada de EE.UU. ingresó al Mar de China Meridional el fin de semana, el primer despliegue durante la administración de Biden de uno de los buques de guerra de 100.000 toneladas con su contingente de más de 60 aviones.
Un comunicado de la Marina de EE.UU. indicó que el portaaviones USS Theodore Roosevelt y sus escoltas, un crucero y un destructor de misiles guiados, estaban en un despliegue programado para defender la libertad de las aguas en el Mar de China Meridional, que en su mayor parte es reclamado por China como su territorio soberano.
«Con dos tercios del comercio mundial viajando a través de esta región tan importante, es vital que mantengamos nuestra presencia y continuemos promoviendo el orden basado en reglas», dijo el Contralmirante Doug Verissimo, comandante del grupo de ataque, en un comunicado.
Pero al cierre de 2020, China dijo que movimientos militares como el del grupo de ataque Roosevelt inflamaron las tensiones.
«Algunos países fuera de la región vienen de lejos para exhibir sus músculos militares, encender enfrentamientos y crear tensiones en el Mar de China Meridional, que es la razón fundamental de la ‘militarización’ de esta región», dijo el portavoz del Ministerio de Defensa, coronel Tan. Kefei, en una rueda de prensa regular.
El año pasado, la Marina de Estados Unidos envió dos de sus portaaviones, los buques de guerra más grandes del mundo, al Mar de China Meridional en dos ocasiones para realizar ejercicios duales, algo que no había hecho en los seis años anteriores.
Washington también realiza regularmente operaciones de libertad de navegación en el Mar de China Meridional, la última vez en diciembre. Estos implican que buques de guerra estadounidenses naveguen dentro del límite de 12 millas náuticas de las costas que las naciones pueden reclamar como sus aguas territoriales.
Nueva ley de guardacostas de China
El viernes, Beijing dio otra indicación de cómo puede reforzar su control sobre las aguas que reclama en la región, aprobando una nueva ley que autoriza a su guardia costera a disparar contra embarcaciones extranjeras.
La ley, que entra en vigor el 1 de febrero, también permite a la guardia costera demoler estructuras extranjeras construidas en arrecifes e islas reclamadas por China y establecer zonas de exclusión para mantener alejados a los barcos extranjeros.
La ley no solo podría aumentar las posibilidades de confrontación entre China y otros reclamantes del Mar de China Meridional, que incluyen a Vietnam, Filipinas, Indonesia, Malasia, Brunei y Taiwán, sino también en el Mar de China Oriental, donde China y Japón disputan la soberanía sobre un grupo de islas conocido como Senkaku en Japón y Diaoyu en China.
En su sitio web de noticias en inglés, el ejército de China se refirió el lunes específicamente a las islas controladas por los japoneses cuando anunció la promulgación de la ley, con un titular que dice que salvaguarda la soberanía de Beijing sobre la cadena rocosa deshabitada, 1.900 kilómetros al suroeste de Tokio.
«La nueva ley de guardacostas muestra la clara actitud y determinación de China de salvaguardar su soberanía», dijo el informe, citando a Lu Yaodong, investigador del Instituto de Estudios Japoneses de la Academia China de Ciencias Sociales, afiliada al estado.
«Las patrullas regulares cerca de las islas Diaoyu estarán garantizadas por la legislación», dijo Lu.
Los barcos chinos pasaron un tiempo récord en las aguas alrededor de las islas el año pasado, lo que provocó la condena de Tokio. Washington ha dicho en repetidas ocasiones que las islas están cubiertas por el tratado de defensa mutua entre Estados Unidos y Japón, que obligaría a Estados Unidos a responder a cualquier acción china contra los barcos japoneses allí.